viernes, 15 de marzo de 2019

Documentación de vivencias personales

¡Hola, lectores!



Hoy es viernes, lo que significa que empieza el fin de semana, ¡empiezan las días más importantes e intensos de Fallas!

Pero también significa que os traemos una entrada más extensa, como ya es nuestra costumbre. ¿Empezamos?

Ya hemos hablado en otras ocasiones sobre la documentación en una novela, de lo importante que es y de la influencia que tiene a la hora de leer una historia. Pero no todo está en Internet, en libros o en vídeos. Hay veces, muchas, que es casi más importante haber vivido o pasado por alguna situación o experiencia en la vida para poder transmitir con mayor impacto las sensaciones, olores o pensamientos del momento que se escribe o se lee.

Pero ya no sólo eso, visitar en persona un sitio en concreto nos puede ayudar mucho a la hora de conseguir crear una mayor ambientación y poder explicar y situar mejor la historia y a los personajes.

Muchos/as autores/as se han valido de experiencias y situaciones distintas para sus novelas, como Victoria Álvarez al visitar algunas ciudades o Beatriz Esteban en su voluntariado. Por otro lado, hay escritores que, como David Lozano o incluso Gustave Flaubert, tienen escritos libros ambientados en ciudades o pueblos en los que han crecido o vivido. Lo hecho por autores/as como los que he mencionado da, en mi opinión, una mayor realidad a la historia y consigue que me sumerja más en lo que pasa y conecte mejor con la situación o con el/la personaje.


Si conseguimos conectar con los personajes de una novela juvenil es, en parte, porque quien ha escrito la historia ha pasado por situaciones iguales o parecidas a lo que leemos. Lo que hace que pueda describir bien lo que ocurre, sienten o piensan los personajes. Conectamos con la historia porque estamos pasando, o hemos pasado, por algo muy parecido. Algo que en más de una vez se puede conseguir con los libros del coming of age.



¡Vive y deja vivir! es una gran frase que nos han dejado, y si lo pensamos bien, se puede aplicar no sólo en el respeto a los demás. La podemos aplicar para escribir, ¿quién nos dice a nosotros que no tenemos algo que contar? ¡O puede que sea la persona que tenemos sentada a nuestro lado o justo delante!

Así que ya lo sabes, ¡disfruta y aprovecha para documentarte vitalmente en muchas cosas! ¡Queremos que las cuentes!

1 comentario:

  1. ¡Hola!
    Qué entrada más guay. Y si no recuerdo mal Alba Quintas cuando vino al club nos contó que en La venganza de Ariadna el pueblo que sale también tiene similitudes y está basado en su pueblo.
    ¡Un beso enorme!

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